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¿Cuáles son las razones político-ideológicas del posicionamiento del equip de govern?

El gobierno municipal, tras la encomienda que en el mes de julio, le asignó la asamblea de la coalición que le sustenta (GBC) decidió, unilateralmente, suspender el compromiso que, de manera pública y firme, había adquirido con la Fundación Badalona Capaç. Ni siquiera se tomó la molestia de comunicarlo formalmente al patronato. Lo comunicó a la comisión de familias, pasadas más tres semanas y en un ambiente de contestación inequívoca por parte de los asistentes. Eso fue el 25 de julio de 2016 y, a partir de entoces el equipo de gobierno municipal, comenzó de manera disciplinada, aunque con escasa eficiencia, la búsqueda de alternativas equiparables. 

Nótese que el encargo de la asamblea de Guanyem no se había dirigido al gobierno, sino a la sociedad.

Des de l’organització emplacen als moviments populars i agents civils de la ciutat implicats a que es vinculin en la recerca d’una solució que defensi els drets de les persones ateses per Badalona  Capaç, defensi el patrimoni natural del Turó de l’Enric i ampliï les propostes de suport de petit comerç i el comerç de proximitat que ja s’estan duent a terme.

En la práctica, ni los movimientos populares ni los agentes civiles han destacado, ni aparecido siquiera, en la búsqueda de esa solución. La asamblea ya cumplió paralizando el proceso, que es lo que pidieron enfáticamente una decena de asistentes a aquella reunión del 3 de julio. Han sido los servicios técnicos del ayuntamiento y la concejalía de urbanismo los que se han dedicado en los últimos meses a esa tarea. A los movimientos populares y los agentes civiles tan solo se les ha visto como detractores sumamente activos, enconados y viscerales de los intereses de la Fundació. 

Cuando uno trata de valorar esa decisión de la Asamblea de Guanyem y las posteriores actuaciones, inevitablemente se han de tener en cuenta algunas consideraciones:

  • La búsqueda de alternativas a la permuta con Hábitat Iniciativas S.L. no es nueva, mucho antes, bajo el mandato del alcalde Serra, se había intentado sin resultados prácticos (2010). Fruto de aquellos intentos fue la cesión del suelo público de la calle Llenguadoc. Aquella operación no se pudo consumar por la pérdida de patrimonio que suponía para la Fundación dejar un suelo de titularidad privada por otro suelo patrimonial público y sin titularidad. Además ni el ayuntamiento ni la Fundación disponían de los 4,5 M€ que se precisaban para la ejecución del proyecto. Nadie, ni los servicios técnicos propios, municipales o externos encontraron salida a esas dificultades administrativas y presupuestarias. 
  • Por eso, la decisión de la Asamblea de Guanyem resulta insólitamente temeraria. La adoptan personas que no conocen los detalles del proceso o los han malentendido y que carecen —¿me equivoco?— de los conocimientos técnicos necesarios para valorar apropiadamente la viabilidad de unas alternativas que, obviamente, han de estar sujetas a derecho administrativo. conxorxats
  • Lo más importante: las razones esgrimidas para justificar la suspensión del procedimiento carecen de consistencia. En primer lugar porque el daño al pequeño comercio no depende de la instalación de los 2 centros de Mercadona que dicen querer impedir; la degradación del pequeño comercio es un proceso mucho más complejo en el que intervienen factores múltiples y que en modo alguno dependen de una actuación municipal como la pretendida. En segundo lugar, porque durante los últimos meses de su mandato se han instalado supermercados por un total de superficie que multiplica la de aquellos que están bloqueando. En tercer lugar porque la instalación de Mercadona es perfectamente legal y legítima, ajustada a derecho en un estado de derecho. Se ha instalado en otros barrios y se seguirá instalando a pesar de los de Guanyem Badalona, pero se instalará ya sin contrapartidas de equipamiento social. Como viene pasando con todos los demás supermercados. Lo que hemos pedido es la mínima complicidad del Ayuntamiento para extender el uso de una parcela que desde hace decenios está calificada como de equipamiento socio-sanitario. El procedimiento administrativo ya ha sido iniciado y, consecuentemente asumido, hecho suyo por el consistorio que, legalmente, ha adquirido responsabilidades sobre el mismo. Ah, y no olvidemos que 250 personas con discapacidad intelectual y sus familias aguardan exasperados desde hace muchos, muchos años. 
  • La vacuidad e ideologización rampante de los argumentos esgrimidos queda patente en el artículo que firman los portavoces de Guanyem Badalona en Comú en El Periódico el pasado 20-07-2016. Dicen que "[Per posar al centre la qualitat de vida dels col·lectius més vulnerables] cal la implicació real del sector públic per a revertir la tendència a dependre d’inversió privada". En plata, eso significa: hemos de combatir el liberalismo que nos invade por doquier —de Inglaterra a Alemania, pasando por Cataluña— y "evitar una sortida lligada al capital privat". De lo que se trata, por encima de todo, es "de la recuperació del sòl per a ús públic". El proyecto de la Fundació Badalona Capaç les viene como anillo al dedo. Es perfecto para sus propósitos antiliberalismo. Demostraremos al mundo, parecen decir con satisfacción y sagacidad, que la municipalización de los servicios es la panacea política, económica y social. Y lo haremos a costa de los discapacitados intelectuales de Badalona, que llevan la minucia de ocho años trabajando en pos de un centro nuevo y que han cometido el imperdonable error de firmar un convenio con Mercadona. ¡Mercadona!, ese monstruo del comercio intrusivo y de la explotación laboral, que vende más barato que nuestro "pequeño comercio" y que además ofrece sueldos más altos a sus trabajadores (los datos sobre salarios los facilita el INE; lo de los precios es una evidencia corroborada por los millones de consumidores que compran cada día).
  • turo09La gran falacia se enfatiza con el máximo descaro en una cita del artículo anterior: "La presència de moviments populars que s’han mostrat contraris al projecte amb arguments fonamentats (defensa del territori i model comercial de ciutat), ha reobert el debat". Igualito que Juan Palomo: yo me lo guiso y yo me lo como. Puro cinismo y pura falsedad. El debate lo ha reabierto la coalición del gobierno municipal. Los movimientos populares, en particular el que representa el grupo denominado Salvem el Turó de l'Enric, han surgido a su amparo. Ese grupo aparece en público en torno al pronunciamiento de la asamblea de Guanyem de julio pasado. Para certificarlo basta con mirar la datación de las entradas en las páginas web correspondientes. Las trabas administrativas a las que aludió la alcaldesa en su reunión del pasado 21-10-2016 con los grupos de la oposición y que, a su parecer, le impedirán cumplir con el compromiso adquirido de presentar al pleno de este mes la propuesta de la Fundació, habían sido anticipadas a los detractores ("moviments populars"), como puede comprobarse en estos enlaces. La noticia de la intencionalidad de govern fue publicada, como mínimo, una semana antes, en tanto la Fundació Badalona Capaç debatía y evaluaba, con ingenua discreción, la "alternativa" de Montigalà. Finalmente las supuestas objeciones del Protectorat a la permuta con Hábitat se han revelado infundadas. El pasado 27 de septiembre, la alcaldesa aludió a ello en el turno de réplica a las intervenciones sobre la moción que le instaba a presentar al pleno de octubre nuestra propuesta. Los hechos demuestran que tanto en el plano jurídico, administrativo y ambiental se han estado buscando con intensidad informes negativos que debiliten la propuesta de la Fundació y que la obliguen a aceptar, como mal menor, cualesquiera de las múltiples alternativas que el gobierno municipal está en condiciones de ofrecerle, pero que en ningún caso pueden equipararse al proyecto vigente. ¿Es éste el modelo de democracia y soberanía que nos proponen?

"La presència de moviments populars que s’han mostrat contraris al projecte amb arguments fonamentats (defensa del territori i model comercial de ciutat), ha reobert el debat" (article citat).

  •  Pero hay algo más que se desprende de la cita anterior, cuando alude al carácter fundamental de los argumentos ("defensa del territori y model comercial"). Es sorprendente que la enjundia sea el mero enunciado, que no parezcan dispuestos a desarrollar las ideas. Y peor aún: que confundan eslóganes y declaraciones, con argumentos. Que esos movimientos aludan al "model comercial" y a la "defensa del territori" no significa que tengan fundamento. Significa lo que significa: para ellos son sólo una bandera, un escudo y la piedra de una honda que lanzan, impasibles, contra las familias y sus tutelados. Pero no encontramos, detrás de esos eslóganes razones de carácter social, económico o ambiental que justifiquen o "fundamenten" lo que pretenden. Por ejemplo podría resultar que lo que pretenden muchos de ellos, —dejemos un cierto margen a la buena fe, que sin duda la habrá— sea defender su tranquilidad residencial o su cuenta de resultados. La presencia de esas razones, no explicitadas públicamente, sí que se nos ha manifestado, de palabra en unos casos y de hecho en otros. ¿Basta con airear un eslogan para tener razón?

[Per posar al centre la qualitat de vida dels col·lectius més vulnerables] cal la implicació real del sector públic per a revertir la tendència a dependre d’inversió privada (article citat).

Lo más preocupante lo refleja, sin duda alguna, el párrafo anterior. ¿Cómo es posible que, para el logro de sus fines ideológicos, pongan en riesgo el futuro de la Fundació Badalona Capaç y, consecuentemente la atención futura de cientos de personas con discapacidad intelectual? ¿Se creen investidos a perpetuidad? ¿Cómo es posible tanta arrogancia y simplicidad? ¿Cómo no se dan cuenta de que la revolución antiliberal no pueden iniciarla por los más vulnerables, precisamente aquellos que están a punto de solventar un déficit que se viene agravando durante los últimos veinte años? En muchos otros ámbitos —más allá de los activistas político-ecológicos directamente implicados—, la reacción es de llana estupefacción, cuando se enteran de lo que está pasando. ¿Cómo expiarán su pecado social, si a consecuencia de tanta inconsciencia y ambición, consiguen que desista el promotor y se pierde esta oportunidad? Para las familias no bastará con que dejen  el gobierno de la ciudad. No sería justo, después de tanto daño causado, de tanto tiempo perdido y de tantos recursos, personales y financieros, malgastados.